Documentales modernos

Últimamente están de moda esos programas televisivos que se quieren denominar documentales, e incluso los anuncian como tales. Se trata de unas series de ciencia ficción, con animalitos generados por ordenador, que intentan, con unos efectos más que logrados, enseñarnos la vida cotidiana de seres que desaparecieron del planeta mucho antes de que los hermanos Lumiere inventasen el cine. Los animalejos suelen ser sobre todo prehistóricos, o sea, dinosaurios de esos grandes y feos que vivían en La Tierra 65 millones de años antes de J.C. y lo curioso es que te los muestran con su nombre, te dicen quien es su mamá, su papá, su hermanitos, te dicen como reaccionaron en un momento determinado...

Antes cuando hablaban de dinosaurios, o bien te enseñaban los fósiles y te decían como podían haber sido, de una forma científica, o bien te decían sus posibles costumbres pero siempre desde un punto de vista teórico, por el tamaño de sus dientes o sus cavidades nasales, en fin, con pruebas. Ahora todo esto ya no importa, y como si de la vida del gato de los Pérez se tratara, te cuentan las aventuras y desventuras de un diplodocus, como si valientes  reporteros del National Geografic, se habrían jugado el pellejo para captar las impactantes imágenes que te muestran, y encima están tan bien hechas las animaciones que te lo tienes que creer.

Luego está el narrador, es el típico narrador de cualquier soporífero documental de la 2 al mediodía, que a pesar de prestarle poca atención, su credibilidad es incuestionable, porque son documentales, y se supone que son pruebas en imágenes de lo que ocurre. Así que a los cinco minutos de oír como te describen, que a Freddy (un Tricertops) le ha abandonado Ronda(su mamá) y se tiene que buscar la vida para conseguir alimento y abrigo, tienes la opción de dormirte en el sofá, o seguir viendo como intentan hacerte creer que unos personajes imaginarios hechos por ordenador, existieron en realidad y se comportaron de esa manera tan determinada, y todo esto basado en conjeturas e imaginación, sin aportar pruebas que lo demuestren.

Si la intención es enseñar, me parece un derroche de medios, porque la información es bastante escasa, está muy manipulada y se centran en personajes específicos, que más bien perecen excepciones, en vez de ejemplos de cómo era toda la especie. Si por el contrario la intención es entretener, entonces cagada total, ya que el ritmo de narración es más bien soporífero y la acción es bastante escasa, por no hablar de las bandas sonoras y los nombrecillos de los personajes. El caso es que la idea global es buena, pero seguro que se podía haber hecho algo que dejase contentos tanto a los que buscan información, como a los que buscan diversión. De momento lo más justo para todos sería que dejasen de llamarlos documentales y los llamasen series de animación, a secas.

by Deivid